Marte conjunto, cuadrado o en oposición a la Luna natal

Supersensible

Éste es el más duro de todos los tránsitos de Marte. La Luna representa nuestras respuestas emocionales, es decir, cómo nos sentimos, cómo reaccionamos ante la vida que nos rodea, etc. El tránsito de Marte combina la cólera con las respuestas emocionales y ello a menudo hace que reaccionemos con gran intensidad ante todo cuanto no rodea. Nos mostramos extremadamente sensibles, excesivamente emotivos, y casi siempre estamos enfadados. Cualquier sugerencia relacionada con nuestra vida personal o con nuestra profesión puede ser interpretada como una crítica. Tenemos las emociones a flor de piel y podemos llegar a reaccionar de una forma excesivamente emocional ante unas situaciones que, una semana antes de que tuviera lugar este tránsito, seguramente nos hubieran hecho sonreír. La sensación de que todo el mundo pretende hacernos daño tan sólo está en nuestra mente y, quizás, nos empeñemos en ocultar nuestros sentimientos y seguir frunciendo el ceño. Ésta no es la mejor época para tomar decisiones importantes con respecto al amor o al trabajo puesto que, evidentemente, nos sentimos furiosos contra el mundo. Podríamos ser mucho más propensos a los accidentes que nunca por lo que deberíamos conducir con más cuidado. La cólera puede ser canalizada a través del ejercicio físico.
Este ciclo siempre podía más que yo. Me peleaba con mis amigos, con mis empleados y con mis seres queridos. Emocionalmente, me sentía tan preocupado, que apenas podía trabajar. Pero, al aprender a recanalizar la energía, ¡este ciclo se convirtió en el más productivo! La energía es muy difícil de reprogramar, pero se puede conseguir. La cólera se evaporará y podrá ser utilizada a otros niveles. Así pues, me dediqué a limpiar las ventanas, a barrer y a fregar y, durante un tiempo, llegué a tener el apartamento más limpio de toda la ciudad. Los primeros minutos de trabajo planificado siempre eran los más muy difíciles porque intentaba aplazarlo: ahora me fumo un cigarrillo y empiezo… hago una llamada y me pongo manos a la obra, etc. Pero cuando por fin empezaba a trabajar, dirigía toda mi cólera hacia la limpieza de las ventanas y del suelo, o a pintar las paredes de la sala de estar. Ahora ya no necesito seguir actuando así y, cuando tengo que escribir un artículo o hacer algún trabajo, puedo utilizar este tránsito de una forma extremadamente constructiva.

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