Los alaridos constituyen la expresión espontánea de una emoción intensa.
Si bien pueden darse por alegría, lo más común es que se emitan ante situaciones de dolor o de miedo.
Oír alaridos en sueños quiere decir que una persona de nuestro entorno requiere nuestra ayuda, pero que no se atreve a pedirla abiertamente.
Si somos nosotros quienes gritamos, significa que somos muy introvertidos, que tendemos a guardarnos los problemas y a no hablar de ellos hasta haberlos resuelto.
Si bien pueden darse por alegría, lo más común es que se emitan ante situaciones de dolor o de miedo.
Oír alaridos en sueños quiere decir que una persona de nuestro entorno requiere nuestra ayuda, pero que no se atreve a pedirla abiertamente.
Si somos nosotros quienes gritamos, significa que somos muy introvertidos, que tendemos a guardarnos los problemas y a no hablar de ellos hasta haberlos resuelto.