Al igual que la sepia, es un animal marino, por lo que tiene relación con el inconsciente.
Hay muchas leyendas y cuentos que hablan de calamares gigantes que habitan el fondo del mar, que posiblemente estén basados en seres reales que hayan sido vistos en diferentes épocas.
Normalmente, en estas historias los calamares aprisionaban las embarcaciones con sus poderosos tentáculos antes de llevárselas a sus guaridas submarinas.
En los sueños, los calamares simbolizan los fantasmas internos, los miedos irracionales que han quedado escondidos como producto de los traumas de la infancia.
Si vemos a un calamar nadando libremente y en una actitud que no sea agresiva, quiere decir que hemos superado todo lo desagradable que nos ha tocado vivir hasta el presente y que esas vivencias dolorosas no tienen ningún peso en nuestras decisiones actuales.
Si el calamar se muestra agresivo, indica que nos sentimos presos de sucesos que nos han pasado hace mucho tiempo, que no hemos podido encajarlos adecuadamente y que hoy se manifiestan en todo lo que hacemos. Cortar en trozos un calamar simboliza desoír la llamada espiritual.
Por una parte queremos avanzar, evolucionar, pero aún estamos demasiado atados al mundo material como para hacer caso a las necesidades de nuestro espíritu.
Si lo que aparece en nuestros sueños es un chipirón, es señal de que estamos intentando construir una sólida amistad con una persona que acabamos de conocer.
Hay muchas leyendas y cuentos que hablan de calamares gigantes que habitan el fondo del mar, que posiblemente estén basados en seres reales que hayan sido vistos en diferentes épocas.
Normalmente, en estas historias los calamares aprisionaban las embarcaciones con sus poderosos tentáculos antes de llevárselas a sus guaridas submarinas.
En los sueños, los calamares simbolizan los fantasmas internos, los miedos irracionales que han quedado escondidos como producto de los traumas de la infancia.
Si vemos a un calamar nadando libremente y en una actitud que no sea agresiva, quiere decir que hemos superado todo lo desagradable que nos ha tocado vivir hasta el presente y que esas vivencias dolorosas no tienen ningún peso en nuestras decisiones actuales.
Si el calamar se muestra agresivo, indica que nos sentimos presos de sucesos que nos han pasado hace mucho tiempo, que no hemos podido encajarlos adecuadamente y que hoy se manifiestan en todo lo que hacemos. Cortar en trozos un calamar simboliza desoír la llamada espiritual.
Por una parte queremos avanzar, evolucionar, pero aún estamos demasiado atados al mundo material como para hacer caso a las necesidades de nuestro espíritu.
Si lo que aparece en nuestros sueños es un chipirón, es señal de que estamos intentando construir una sólida amistad con una persona que acabamos de conocer.