Si soñamos que estamos en un desierto, es necesario prestar mucha atención a los sentimientos que el paisaje nos ha suscitado.
Si lo que experimentamos es angustia o tristeza, es señal de que nos sentimos profundamente solos e incomprendidos.
En caso de que el sentimiento fuera de paz, serenidad o alegría, este paisaje sugeriría que estamos inmersos en un proceso espiritual que nos obliga a tomar distancia con el mundo material.
Si lo que experimentamos es angustia o tristeza, es señal de que nos sentimos profundamente solos e incomprendidos.
En caso de que el sentimiento fuera de paz, serenidad o alegría, este paisaje sugeriría que estamos inmersos en un proceso espiritual que nos obliga a tomar distancia con el mundo material.