Como lugar de culto simboliza la necesidad de desarrollo espiritual.
Si profesamos la religión judía, el hecho de entrar en una sinagoga simboliza la búsqueda de la unión con Dios.
Si profesamos otra religión, en cambio, quiere decir que no nos sentimos del todo conformes con lo que en ella se nos enseña.
Si profesamos la religión judía, el hecho de entrar en una sinagoga simboliza la búsqueda de la unión con Dios.
Si profesamos otra religión, en cambio, quiere decir que no nos sentimos del todo conformes con lo que en ella se nos enseña.