El Amor Universal
Desea despertar las conciencias de las masas para permitirles escuchar su voz interior y sabiduría. Grandes deseos de proteger a los demás, sacrificando sus propios intereses. Encarna el amor universal e incondicional.
Esta es una Misión de amor Universal, muy difícil de desarrollar, porque requiere del despojo material para poder vivir al nivel de esta energía, que pide una vida de servicio sin esperar nada a cambio. Es el amor perfecto, la Guía, un líder especial, de una personalidad nada común que deberá servir como un súper canal, transmitiendo los conocimientos fundamentales y más elevados.
Astrológicamente, el número 3 se vincula con Júpiter, el planeta más grande del sistema, que trae abundancia, integración. Simbólicamente, el 33 concentra la energía de dos Júpiter, que era considerado uno de los grandes benefactores. Es la más alta vibración, de tolerancia, pureza, servicio, serenidad y amor, que para ser alcanzada necesita equilibrar aspectos afectivos que no le hagan caer en la indecisión, inestabilidad, los celos y la sobreprotección.
Esas cualidades exageradas tienen que ver con la esencia del 33 que es el 6, asociado a Venus: un planeta vinculado igualmente con el amor, la armonía, y en su faceta negativa, la pereza y la dependencia sentimental. Por ello, la responsabilidad afectiva a un nivel superior es su gran trabajo a realizar.
Esta es una Misión de amor Universal, muy difícil de desarrollar, porque requiere del despojo material para poder vivir al nivel de esta energía, que pide una vida de servicio sin esperar nada a cambio. Es el amor perfecto, la Guía, un líder especial, de una personalidad nada común que deberá servir como un súper canal, transmitiendo los conocimientos fundamentales y más elevados.
Astrológicamente, el número 3 se vincula con Júpiter, el planeta más grande del sistema, que trae abundancia, integración. Simbólicamente, el 33 concentra la energía de dos Júpiter, que era considerado uno de los grandes benefactores. Es la más alta vibración, de tolerancia, pureza, servicio, serenidad y amor, que para ser alcanzada necesita equilibrar aspectos afectivos que no le hagan caer en la indecisión, inestabilidad, los celos y la sobreprotección.
Esas cualidades exageradas tienen que ver con la esencia del 33 que es el 6, asociado a Venus: un planeta vinculado igualmente con el amor, la armonía, y en su faceta negativa, la pereza y la dependencia sentimental. Por ello, la responsabilidad afectiva a un nivel superior es su gran trabajo a realizar.