La Tierra es el elemento más denso, el más material, físico, medible, tangible, lento, perseverante y fuerte. La persona que tiene este elemento en su signo -Tauro, Virgo y Capricornio- percibe la realidad a partir de las sensaciones concretas que le proveen los cinco sentidos.
Conocerá el mundo: tocando, oliendo, viendo, oyendo, hablando y escuchando. Eso presupone también lentitud, ya que necesita de esa primera conexión para percibir, interpretar y reaccionar ante esos estímulos.
Las personas Tierra, por tanto, son eminentemente sensitivas y realistas, su visión del mundo, de sí mismos, de lo que dan y reciben, de los demás, será concreta, conservadora, práctica. Lo suyo es realizar la materia, traducir físicamente ideas abstractas. A su vez, tiende a preservar, a guardar y acumular, otra propiedad derivada de la densidad del elemento.
Necesita pautas fijas, ya sea de proyectos, ideas, conductas o valores, al tiempo que también sabrá defenderlos. Por eso, suelen ser personas que creen en las tradiciones, en la patria, la familia, que aman la naturaleza.
Dueños de gran fuerza natural, son trabajadores y se esfuerzan con ahínco para conseguir lo que quieren. Tienden a ser fijos y concentrados en su tarea, pero propenden también a ser rígidos y rutinarios en su visión.
Buscan de forma natural preservar, acumular, controlar, es decir, tener un sentido palpable de sus posesiones, sean afectivas o materiales.
VIRTUDES: trabajo, esfuerzo, tenacidad, concentración, vitalidad, paciencia, solidez, cautela, sobriedad, capacidad de disfrute, placer y sensualidad.
DEFECTOS: lentitud, tozudez, rigidez, falta de imaginación, dificultades para la abstracción y la acción. Exceso de hedonismo, lujuria, adícciones.
LOS SIGNOS DE TIERRA
Cada signo expresará estas cualidades según su propio temperamento:
Tauro: es el más terrestre y poseedor de los tres.
Virgo: es el más mental, preparador y planificador.
Capricornio: es el que sabe sacar mejor provecho, el más utilitario.
Volver a Astrología