• No se burle nunca de ellos.
• Conserve ante todo el contacto y el diálogo.
• Necesita orden, pero la excesiva rutina acentúa su pasividad social.
• Necesitan apoyo constantemente para lanzarse tras sus objetivos.
La hija Virgo
Esta hija es tranquila, receptiva y obediente. Posee una naturaleza tímida y su emotividad es frágil, aunque no lo parezca. Necesita la aprobación y el estímulo constante ante sus pequeños avances diarios. Es detallista y muy observadora, ordenada, pulcra y bastante escrupulosa. Crítica, es servicial y buena compañera.
El hijo Virgo
Es mental, introspectivo, reservado y retraído, por lo que resulta difícil conocerlo. Aunque no es hablador, la necesidad de comunicarse con los demás es muy grande. Es perseverante, práctico e ingenioso, pero dependiente. Disciplinado y prolijo, se siente a gusto en lugares ordenados. Si bien es curioso, no siempre se atreve a preguntar o pedir.