En una mujer, soñar con este personaje mitológico puede simbolizar el miedo de ser demasiado sobreprotectora, de ahogar al hijo con un afecto posesivo.
En un hombre, en cambio, simboliza el apego a la madre, la tendencia a comparar desfavorablemente con ella a todas las mujeres.
En un hombre, en cambio, simboliza el apego a la madre, la tendencia a comparar desfavorablemente con ella a todas las mujeres.