El hecho de felicitar en sueños a otra persona por algún trabajo que haya podido realizar simboliza nuestra generosidad y solidaridad.
Si somos nosotros quienes, por el contrario, recibimos las felicitaciones quiere decir que no tenemos demasiada confianza en nosotros mismos, que necesitamos que, desde fuera, nos confirmen que somos valiosos.
Si somos nosotros quienes, por el contrario, recibimos las felicitaciones quiere decir que no tenemos demasiada confianza en nosotros mismos, que necesitamos que, desde fuera, nos confirmen que somos valiosos.