Los collares rodean una de las zonas más vulnerables de nuestro cuerpo: el cuello.
Basta ajustados más de lo debido para que, inmediatamente, pongamos nuestra vida en peligro.
Por lo fácil que es manejar a un animal que tenga el collar puesto, en los sueños simbolizan la libertad.
Si alguien nos pone un collar quiere decir que pretende recortar nuestra independencia.
En caso de ser nosotros mismos quienes nos lo ponemos, es nuestra vanidad, nuestra actitud egocéntrica, la que nos quita posibilidades de vivir más intensamente.
Si regalamos un collar a otra persona, quiere decir que no nos sentimos seguros de su fidelidad y que, por ello, intentamos mantenerla lo más controlada posible.
Basta ajustados más de lo debido para que, inmediatamente, pongamos nuestra vida en peligro.
Por lo fácil que es manejar a un animal que tenga el collar puesto, en los sueños simbolizan la libertad.
Si alguien nos pone un collar quiere decir que pretende recortar nuestra independencia.
En caso de ser nosotros mismos quienes nos lo ponemos, es nuestra vanidad, nuestra actitud egocéntrica, la que nos quita posibilidades de vivir más intensamente.
Si regalamos un collar a otra persona, quiere decir que no nos sentimos seguros de su fidelidad y que, por ello, intentamos mantenerla lo más controlada posible.