El cabalgar simboliza, por un lado, el dominio de nuestros instintos más básicos; por ello, si participamos como jinetes en una carrera en el hipódromo, debemos interpretar que hemos conseguido superar algunos defectos gracias al estímulo y ejemplo que hemos recibido de una persona de nuestro entorno.
Pero el hipódromo está ligado a los juegos de azar, de manera que si soñamos que hacemos apuestas o que presenciamos una carrera, quiere decir que buscamos una salida fácil a la situación angustiosa que estamos viviendo.
Ésta no tiene que ser necesariamente económica, puede tratarse de un problema familiar, amoroso, laboral, etc.
Pero el hipódromo está ligado a los juegos de azar, de manera que si soñamos que hacemos apuestas o que presenciamos una carrera, quiere decir que buscamos una salida fácil a la situación angustiosa que estamos viviendo.
Ésta no tiene que ser necesariamente económica, puede tratarse de un problema familiar, amoroso, laboral, etc.