Estos árboles, con sus flores de delicado perfume, como otros cítricos, simbolizan el matrimonio o las relaciones amorosas.
Si se encuentran florecidos o cargados de frutos y en buen estado, auguran una relación apasionada y sincera.
Si los azahares están marchitos o las naranjas en mal estado, es señal de que hemos dejado pasar un amor que nos hubiera dado una gran felicidad.
Si se encuentran florecidos o cargados de frutos y en buen estado, auguran una relación apasionada y sincera.
Si los azahares están marchitos o las naranjas en mal estado, es señal de que hemos dejado pasar un amor que nos hubiera dado una gran felicidad.