Simboliza la búsqueda interior, el conocimiento profundo de uno mismo y el despertar espiritual.
Si vamos por el desierto en busca de un oasis, eso quiere decir que no descansamos en nuestro afán de mejorar y que tenemos las ideas muy claras.
Si nos encontramos en medio de un oasis, significa que hemos hallado en nuestro interior cualidades positivas que no habíamos imaginado.
Nos podemos reconocer ahora con más fuerza, entereza y madurez y esta visión será la que nos impulse a conseguir nuevas metas.
Ver un oasis desde el aire quiere decir que no encontramos la manera de aquietar nuestro interior, que los problemas nos superan y no encontramos la forma de solucionarlos.
Si vamos por el desierto en busca de un oasis, eso quiere decir que no descansamos en nuestro afán de mejorar y que tenemos las ideas muy claras.
Si nos encontramos en medio de un oasis, significa que hemos hallado en nuestro interior cualidades positivas que no habíamos imaginado.
Nos podemos reconocer ahora con más fuerza, entereza y madurez y esta visión será la que nos impulse a conseguir nuevas metas.
Ver un oasis desde el aire quiere decir que no encontramos la manera de aquietar nuestro interior, que los problemas nos superan y no encontramos la forma de solucionarlos.