Representa la trama de circunstancias que determinan nuestro destino.
Dejarnos mecer por las olas significa que tenemos una actitud indolente ante la vida, que confiamos que las cosas se arreglen por sí mismas.
Si en el sueño somos revolcados por una ola quiere decir que estamos viviendo un problema que nos supera pero que, sin duda, saldremos de él fortalecidos y maduros.
Caminar sobre las olas es indicio de elevación espiritual; indica que hemos superado el materialismo y que tenemos metas elevadas.
Dejarnos mecer por las olas significa que tenemos una actitud indolente ante la vida, que confiamos que las cosas se arreglen por sí mismas.
Si en el sueño somos revolcados por una ola quiere decir que estamos viviendo un problema que nos supera pero que, sin duda, saldremos de él fortalecidos y maduros.
Caminar sobre las olas es indicio de elevación espiritual; indica que hemos superado el materialismo y que tenemos metas elevadas.