El hecho de pertenecer a la retaguardia de un ejército en movimiento indica que, en nuestro entorno, hay personas dispuestas a iniciar un conflicto.
También que, aun cuando estemos de acuerdo con lo que ellas reclaman, no aceptamos hacerlo mediante una confrontación desagradable, sino que preferimos utilizar el tacto y la diplomacia para conseguir justicia.
También que, aun cuando estemos de acuerdo con lo que ellas reclaman, no aceptamos hacerlo mediante una confrontación desagradable, sino que preferimos utilizar el tacto y la diplomacia para conseguir justicia.