Podemos decir de ellos que son afines. Una vez que se han enamorado, todo cambia para ellos, todo se convierte en algo más profundo, con más sentido y una emoción más desbordante de la que ellos podrían haber soñado que pudiera existir. Ambos son grandes soñadores.
La mujer Escorpio sabe lo que quiere y hasta dónde quiere llegar, y le sobra voluntad para poderlo conseguir. Además posee una paciencia extraordinaria.
En cambio a él le falta pasión para emprender cualquier asunto, es demasiado tranquilo, pues no le importa lo que le cueste conseguir su objetivo. Esto en vez de alejarlos, los atrae mucho más de lo imaginable y llegan a compenetrarse y complementarse el uno con el otro. Su relación puede llegar a ser todo lo satisfactorio que cabe esperar y muy duradera.