El Conejo y la Serpiente

La Serpiente resulta atractivamente peligrosa para el Conejo

Con su hipnótica belleza lo seduce hasta hacerle perder la cabeza, pero cuando la recupera generalmente desea escapar rápidamente. La sangre fría de la Serpiente asusta a la cálido Conejo, quien necesita de expresiones cariñosas, caricias y alabanzas para sentirse querido.
Este tipo de manifestaciones no son tan deseables para la gélida Serpiente, que prefiere expresar su amor completamente de otra forma. Naturalezas tan diversas no suelen unirse por largo tiempo, sin embargo encuentros efímeros con altos niveles de pasión incluidos pueden producirse entre ellos.
La división se produce en el diferente modo de ver la vida, así como en las necesidades y prioridades que tampoco son las mismas.
Estos dos signos se mueven por energías muy distintas, no obstante sus metas sean similares.
La sabiduría de la Serpiente resulta de gran utilidad para el Conejo, en tanto ella aporta su natural diplomacia y elegancia beneficiando y embelleciendo la vida de este compañero.

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