El Perro y el Mono

Con el Mono, el Perro corre peligro

Su modo de actuar ante la vida, es radicalmente distinto. Las actitudes generalmente aprovechadoras del ingenioso Mono le parecen poco agradables al Perro justiciero. Estos dos nativos pueden sentir una intensa atracción en el inicio de su relacionamiento. Pero la duración no será fácil, ya que una vez que el Perro entiende los motivos del Mono, su instinto le impulsa a abandonarlo.
Esta reunión por lo tanto, aún en el plano profesional no será fácil, para el Perro la forma de actuar del Mono es completamente reprobable y no se someterá fácilmente a su dominio. El nativo de Mono en tanto, prefiere relacionarse con personas más flexibles, ya que la rigidez en las posiciones del Perro, le destrozarán los nervios.
Estos dos signos no logran un buen entendimiento, por lo que todo lo que emprendan juntos tenderá a derrumbarse. Sus naturalezas opuestas se sienten atraídas la una por la otra, pero el continuo conflicto es irremediable entre estas dos poderosas personalidades.

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