Leo y el Sol, su regente, son los manantiales primigenios del color dorado.
Es un amarillo que ha alcanzado su plena madurez y ha llegado a un estado inalterable, simbolizado por el oro.
El color dorado este es un color sobrenatural. Es símbolo de realeza y refiere al mundo mágico. Es el principio y el fin de la alquimia, y es símbolo, también, del dinero.
El dorado es la expresión de la esencia y la providencia del espíritu divino.
Según sea la combinación de este con los otros colores será acercamiento o apertura espiritual, o bien, peligro de dejarse deslumhrar por su brillo.