Los movimientos giratorios simbolizan, entre otras cosas, el egocentrismo.
Los remolinos, sobre todo si son de agua o de algún elemento líquido, indican que nos mostramos muy ególatras en nuestras relaciones amorosas, que nos empeñamos en ser protagonistas ignorando, para ello, las necesidades de la persona que amamos.
Los remolinos, sobre todo si son de agua o de algún elemento líquido, indican que nos mostramos muy ególatras en nuestras relaciones amorosas, que nos empeñamos en ser protagonistas ignorando, para ello, las necesidades de la persona que amamos.